Yo estudié derecho. Encontré en mi carrera, en el área de los Derechos Humanos, cómo conectar con el otro y transformar la realidad en la que vivimos. Encontré una vía muy poderosa para generar bienestar y atender a ese llamado de la dignidad humana frente al sufrimiento y la injusticia. Contar con la capacidad de decir éstos son los límites y esos límites son nuestros derechos, así como también nuestras posibilidades de exigir y trazar nuevos horizontes. Esa dignidad humana existe para protegerla y garantizarla. Y como sociedad hay responsables, un estado, reglas; recordarlo me motiva y me inspira.
En la universidad tuve la oportunidad de atender a personas en clínicas jurídicas, en zonas populares. Recuerdo llegar el fin de semana muy temprano, en la mañana, y ver una fila de personas, larguísima, esperando recibir un consejo. Todavía no estaba graduada. Íbamos como abogados para asesorar, yo veía que la información que manejaba en ese momento, por haber estudiado derecho, era útil para las personas y les podía cambiar sus vidas. Si esto que yo he aprendido, pensaba en ese momento, sirve para ayudar a las personas que se encuentran en peores condiciones, en especial a las mujeres que estaban muy afectadas por situaciones de injusticia, pobreza y desigualdad, entonces, a esto quiero dedicar mi vida. Es algo para mí transformador. También la enseñanza. Creo que apostarle a la juventud; a las nuevas generaciones, es un trabajo trascendente. Ayudar a acelerar el proceso de aprendizaje. He combinado el activismo y la enseñanza, esa capacidad de procesar conocimientos en la investigación para transformar realidades.
Mi línea transversal, todo lo que yo hago y pienso, es el poder de lo colectivo. Cada una de nosotras es única, poderosa, talentosa. Tiene sus capacidades. Si unimos nuestras capacidades, y, además, nos articulamos, con el poder de las redes, la coordinación; trabajando juntas, el resultado es grande, transformador. Si uno con sus capacidades logra transformar ciertos espacios, con el poder colectivo cambias el mundo.
